Hoy entrevistamos a la encargada de esta pastoral hace más de 20 años.

“Somos un equipo grande, sola, jamás podría. Somos unas 35 personas, entre el equipo de domicilio y clínica. Es un grupo muy comprometido. En general, visitamos enfermos y se trata de acompañarlos, conversamos, se está con ellos, se les da la comunión. Un servidor está a cargo de un enfermo. Se produce un vínculo afectivo afectivo que es muy bueno para el enfermo. Es muy enriquecedor, recibimos más que lo que damos.”

Sobre la pandemia nos cuenta que “este año ha sido muy difícil. Prácticamente solo nos hemos comunicado por teléfono, cada servidor llama a su enfermo, conversa, lo ayuda a rezar la comunión espiritual. Nos mantenemos vinculados con nuestros enfermos en los domicilios, no tanto la gente de clínica, que está menos tiempo.” Además de domicilios y la Clínica Alemana, en años regulares, visitan un par de hogares y una residencia.

Sobre la experiencia de ser servidor, Ana María nos cuenta:

“Vale la pena. Hace unos años ingresó un señor que se jubiló, y que decía que sentía un vacío en su interior. Él pensó que era por una carrera universitaria que no había hecho, pero una vez jubilado, terminó la carrera y siguió con el vacío. Empezó a participar en la parroquia, y se unió a nuestro servicio. Tomó los cursos y la práctica, y le cambió la vida. Se entregó totalmente. Años después empezó con problemas a la vista y tuvo que dejarlo. Pero tiene un efecto muy lindo.”

“Tenemos un apoyo espiritual importante del padre Roberto. Nos sentimos regalonas; el padre es muy preocupado de los enfermos. Tenemos una misa especial de la pastoral todos los viernes a las 09:00 hrs. Hay un desarrollo espiritual: aún cuando no sea la intención, la persona va creciendo. Con tanto años también se produce una unidad entre los servidores. Es hermoso tener esta experiencia cuando pensamos que se nos acabó la vida, una vez que nos jubilamos. Es una gran alternativa para jubilados, y también necesitamos gente más joven, especialmente en este tiempo de pandemia.”

¡Felicitamos a Ana María, y a todo el equipo de la pastoral de Vida y Salud, por un excelente trabajo el 2020 y un bendecido 2021!

Si deseas mayor información, escribe a abubastidas@gmail.com.

Fotos: Servidoras de la Pastoral de Vida y Salud; visita a enfermos; Unción de los enfermos en la parroquia (2019).