Desde su oficina en la Pastoral de la Universidad Católica, donde es capellán, el Padre Antonio  expresa su anhelo para la nueva misión que emprende en la parroquia. “Me dispongo a  todo lo que se necesite,  sobre todo a dar el testimonio de la fe que he recibido”, dice el sacerdote.

El Padre Antonio es Italiano. Catania, su ciudad natal, lo vio partir a Chile hace 29 años para cumplir la misión que su movimiento, Comunión y Liberación, le encomendó:  ir por el mundo a llevar la belleza, la alegría,  la vida en Cristo,  y esa tarea es la que ha guiado sus pasos como sacerdote.

“En 1987 llegué a este país, por entonces el movimiento tenía varios destinos posibles para mí, París,  Alemania, Brasil. Llegué a Chile según las normas de la iglesia, bajo la figura de una colaboración entre las iglesia, un contrato entre el arzobispo de Catania y el arzobispo de Santiago, para servir a la diócesis que me recibe”.

En nuestro país, el Padre Antonio ha dado clases en el seminario de San Bernardo y en el Hogar Catequístico de la Universidad Católica. Actualmente da un curso  teológico en esta misma universidad, es capellán del Colegio San Rafael, celebra la eucaristía una vez a la semana en Canal 13  y recientemente ha sido designado como Vicario Parroquial de nuestra parroquia, con la que ha cultivado una relación de familiaridad y cercanía.  Aquí ha prestado su servicio en la confesión de los días miércoles en la tarde y en la celebración de la misa dominical en la Capilla El Dorado.

¿Cuál es su misión como vicario parroquial?

“Me dispongo a  todo lo que se necesite,  sobre todo a dar el testimonio de la fe que he recibido como una gracia desde mi familia de origen, de este encuentro decisivo que marcó la vida con un carisma que me hace familiar a Jesús y a la iglesia como un bien para mí que puedo compartir eso con todo el mundo a través de las cosa puntuales que la parroquia necesite. Voy a la parroquia a dar testimonio de que Cristo promete al cien por uno en esta vida que es la vida eterna”.

En nuestra parroquia el Padre Antonio tendrá las siguientes actividades:

Celebración de misa jueves y viernes a las 20.00 horas, domingo a las 09.00 y 10.00 horas. Confesiones: miércoles, sábado y domingo desde las 19:30 horas y hasta terminada la misa. Atención a las personas que lo requieran los lunes, martes y viernes en oficina parroquial entre 18.00 y 20.00 hrs.

En la Capilla El Dorado celebrará la eucaristía el  domingo a las 12.00 horas.

Contentos de tener al Padre Antonio en medio de nuestra comunidad,  acogemos con alegría su disposición y servicio para nuestra iglesia.