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El Pontífice nos invitó a los católicos a seguir el ejemplo de Jesús para descubrir nuestra misión como católicos. “Cristo estuvo siempre en relación íntima con el Padre a través de la oración, durante su vida en la Tierra. Todas las decisiones y las elecciones más importantes, las tomó después de haber rezado. Precisamente en esta relación, en la oración que le une al Padre en el Espíritu, Jesús descubrió el sentido de su ser hombre, de su existencia en el mundo, porque Él estaba en aquella misión por nosotros”.
Por eso, nos llamó a rezar para que “pidamos en la oración la gracia de un corazón pastoral, abierto, cercano a todos, para llevar el mensaje del Señor y también sentir la nostalgia de Cristo. Porque, nuestra vida sin este amor que sufre y arriesga, no va y corremos el riesgo de pastar solo nosotros mismos”.
Si queremos desarrollar nuestra pasión por evangelizar, el Papa Francisco señaló que hay que tener siempre presente el capítulo 15 del Evangelio de San Lucas, que nos habla de la parábola de la oveja perdida, de la moneda perdida y del hijo pródigo. Ahí descubrimos que Dios no está para contemplar el recinto de sus ovejas y tampoco las amenaza para que no se vayan. Más bien, si una sale y se pierde, no la abandona, sino que la busca. No dice: “¡Se ha ido, culpa suya, asunto suyo!”.
“El corazón pastoral reacciona de otra manera: el corazón pastoral sufre y el corazón pastoral arriesga. Sufre: sí, Dios sufre por quien se va y, mientras lo llora, lo ama todavía más. El Señor sufre cuando nos distanciamos de su corazón. Sufre por los que no conocen la belleza de su amor y el calor de su abrazo. Pero, en respuesta a este sufrimiento, no se cierra, sino que arriesga: deja las noventa y nueve ovejas que están a salvo y se aventura por la única perdida”, afirmó el Santo Padre.
Finalmente, Francisco invitó a preguntarnos si tenemos sentimientos similares. Quizá vemos como adversarios o enemigos a los que han dejado el rebaño. Encontrándoles en la escuela, el trabajo, en las calles de la ciudad, ¿por qué no pensar más bien que tenemos una bonita ocasión de testimoniarles la alegría de un Padre que los ama y que nunca les ha olvidado?
Fuente: vaticannews.va