Este domingo, 1 de diciembre, comenzamos el Tiempo de Adviento, un tiempo de gracia y espera activa, que nos llama a una conversión profunda y sincera para recibir a Jesús en nuestras vidas.

Ese día, en todas las Misas de 10:00, 11:00, 12:00, 13:00 y 20:00 hrs. serán bendecidas las Coronas de Adviento y, a las mujeres embarazadas, que viven la dulce espera, se les impartirá una bendición especial.

Las dos primeras semanas del Adviento tienen un carácter escatológico. Nos invitan a reflexionar sobre la "segunda venida" de Jesús, recordándonos que nuestra vida tiene una dimensión eterna.

Las dos siguientes semanas, conocidas como la "Semana Santa" de la Navidad, nos llevan a contemplar el misterio de la Encarnación, el momento en que el Hijo de Dios se hizo hombre para habitar entre nosotros.

En este tiempo es fundamental la oración porque nos conecta con Dios y nos ayuda a descubrir su presencia en nuestra vida diaria, nos permite escuchar su Palabra, meditarla y dejar que transforme nuestro interior.

El Adviento también nos invita a la caridad, porque amar al prójimo, especialmente a los más necesitados, nos acerca a Jesús, que vino a servir. Una buena instancia para practicarla es la campaña Navidad con el Hermano en la que queremos llevar una cena a 1.010 familias. 

Finalmente, vivir la penitencia en cada entrega y sacrificio que hacemos, nos prepara para recibir a Salvador con humildad.

Convirtamos este tiempo en una verdadera preparación del corazón, dejando que la luz de Cristo ilumine nuestras vidas y las de quienes nos rodean.

¡Te esperamos en Misa!