En una nueva catequesis, el miércoles 22 de enero, el Papa Francisco destacó la actitud de la Virgen María como ejemplo de disponibilidad y confianza en Dios, quien, al dar su “sí”, se puso al servicio del plan de salvación con total entrega.

El Santo Padre recordó que María, como "colaboradora de Dios Padre", abrió su corazón a la acción del Espíritu Santo, permitiendo que el Hijo de Dios habitara en Ella y transformara su vida en un verdadero "tabernáculo" de esperanza.

María no permitió que el temor la paralizara. Su "sí" incondicional al plan divino demuestra su confianza plena en la providencia y amor de Dios. Aceptó su misión con valentía y apertura total al Espíritu Santo.

El Papa Francisco recordó que la Virgen María es inspiración para que los creyentes abran “los oídos a la Palabra divina”, la acojan y aprecien “para que transforme nuestros corazones en tabernáculos de su presencia, en hogares hospitalarios donde crezca la esperanza”, finalizó.

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